Había una vez...Un cuento, un mito y una leyenda

356. Cosijogui y Gabicha. (mito Zapoteca)

May 24, 2022 Juan David Betancur Fernandez Season 4 Episode 89
Había una vez...Un cuento, un mito y una leyenda
356. Cosijogui y Gabicha. (mito Zapoteca)
Show Notes

Había una vez en un mundo Zapoteca, mucho tiempo antes que se hiciera la luz un dios del rayo llamado Cosijogui, quien vivía en un hermoso trono acompañado de cuatro inmensas ollas de barro. Cada una de las ollas de barro eran cuidadas por un dios menor que tenía forma de lagartija. 

 

La primera olla a los pies de Cosijoguim guardaba todas las nubes del mundo, la segunda era la encargada de proteger y conservar toda el agua, la tercera tenía todo el granizo del mundo y la cuarta olla de barro tenía todos los vientos que había en el mundo. 

 

La tarea de aquellos dioses menores con forma de lagartija era mantener en secreto el contenido de las ollas de barro. 

 

Un día Cosijogui se levantó de su trono y le dijo al guardián de la olla de barro. Despierta las nubes y ordénales que salgan de su olla.

 

Totalmente sorprendido por la orden de el dios mayor, este guardián llego a lo alto de la olla y la destapo. Inmediatamente de la boca de aquel jarrón comenzaron a salir nubes que pronto cubrieron el cielo y las nubes comenzaron a moverse libremente mientras su guardián menor  comenzaba a saltar entre ellas formando relámpagos entre las nubes, que comenzaron a iluminar aquel mundo de oscuridad perpetua. 

 

Luego el Dios Cosijogui, se levanto de nuevo de su trono y dijo. Guardian del agua, abre tu olla de barro y saca las aguas. 

 

Y aquel guardián agazapado junto a su olla, salto presuroso y subió hasta la boca de aquel jarrón y de un movimiento brusco retiro la tapa. Y rápidamente comenzaron a salir todas y cada una de las gotas de agua, formándose una lluvia que comenzaron a caer estrepitosamente a la tierra llenándola de agua. Y todo esto sucedía mientras el guardián de las nubes saltaba alegremente entre las nubes formando rayos entre ellas.

 

Los habitantes de la tierra que nunca habían visto esto antes comenzaron a pedirle al dios que parara dicha tempestad ya que tenían miedo de morir ahogados si seguía cayendo agua sobre sus terrenos. Las mujeres de la tribu decidieron enviar una comitiva a rogar a Cosijogui que detuviera la lluvia. 

 

Las mujeres mensajeras que subieron al cielo pasaron junto a las otras dos tinajas de barro y curiosas de su contenido, le pidieron al dios del rayo que abriesen las ollas y les mostrase su contenido secreto. 

 

El dios sorprendido por dicha solicitud, y como castigo por la curiosidad de aquellas mujeres le ordeno al tercer guardián que abriera la tercera olla de barro. Y este salto sobre la tapa y levantándola dejo salir todo el granizo contenido en ella. Y aquel granizo comenzó a caer sobre la tierra como piedras azotando los cultivos, las casas, los animales y todos aquellos que vivían en la superficie de la tierra. 

Y allí en la tierra todos los hombres vieron como sus plantaciones comenzaban a perderse, como sus casas se caían por el peso del granizo y como los animales, los pájaros  y ellos mismos comenzaban a sufrir heridas por la caída repentina del granizo. 

 

Aterrorizados y enojados contra el dios Cosijogui, todos los seres vivos de la tierra se reunieron e invocaron a pitao.  El gran aliento y creador de todo. Pitao se compadeció de lo que estaban sufriendo los hombres y los animales y ordeno que las nubes negras del oriente se dispersaran y dejaran pasar al Dios Gabicha, el sol. 

 

Y Gabicha apareció por el oriente, desplegando toda su energía y luz y Cosijogui  el rayo sintió temor ya que aquel nuevo dios era mas poderoso que el mismo. Y cuando Gabicha llego a lo alto del cielo, ordeno que la ultima lagartija que protegía la cuarta vasija de barro la abriera. 

La lagartija guardiana subió hasta la tapa de la olla y retirándola dejo salir todos los vientos del mundo. Y ellos fueron dirigidos por el dios Gabi