Había una vez...Un cuento, un mito y una leyenda
Había una vez...Un cuento, un mito y una leyenda
583. Los secretos mágicos
Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.
Juan David Betancur
elnarradororal@gmail.com
Habia una vez un rey que había decidido conocer todos los secretos del mundo. Para ello formo un consejo de sabios que tenían para la tarea de escudriñar el mundo identificando los elementos más extraños que pudieran existir, para luego presentárselos a el. Los sabios de dispersaron por el mundo y frecuentemente llegaban con algún secreto que habían encontrado y finalmente el rey ya podía dominarlo.
A medida que el conocimiento crecia en la mente de aquel rey su temperamento iba cambiando. Se iba volviendo más y más arrogante y cuando un emisario llegaba con algo que no le satisfacía lo mandaba a ejecutar.
En el reino los habitantes comenzaron a temerle ya que podía mandar a ejecutar a decenas de personas diariamente.
De pronto se presento ante las puertas del reino un hombre viejo con una vestimenta raida por el uso y le dijo a los guardianes que el era un ser poderoso que tenía los conocimientos de cientos o miles de secretos.
Que sabía que el rey quería conocer y poseer esos secretos mágicos y que lo llevaran frente a el
Los guardias temerosos de que realmente este pobre hombre fuera un mago poderoso lo condujeron a la sala real donde el rey se sentaba en su trono de oro. El rey vio así como viejo entraba caminando con mirada altanera pero mal vestido.
El rey le dijo. Me han dicho que eres un mago muy poderoso que viene de lejanas tierras y que conoces grandes secretos. Es esto verdad.
El viejo miro al rey a los ojos y le dijo. Es verdad su majestad Tengo cientos y miles de encantos que asombrarían al más culto de los mortales.
Y acto seguido comenzó con la demostración.
Lo primero que hizo fue convertir el trono de oro de el rey en piedra y luego ante el reclamo del rey convertirlo en oro de nuevo. Luego hizo caer una sombra misteriosa en todo el pueblo que disipo a su antojo, luego cientos de pájaros entraron volando por las ventanas de la sala del trono y desaparecieron en cuanto el mago les ordeno. Y así Por horas y horas el viejo realizaba proezas mágicas que nadie había visto anteriormente.
El rey asombrado y deseoso de tener ese poder hizo arrestar al viejo y lo mando al calabozo de la torre diciendole que solamente podría salir cuando le revelara que magia podía el controlar para hacer lo mismo.
El viejo se negó y solamente le dijo al rey que todos sus poderes venían de lo más oscuro de la humanidad
Lo más oscuro debe ser el mal de el diablo. contesto el rey.
El viejo sonrio y le dijo. Su majestad debo decirte que te sorprenderías de la forma que tiene el diablo. Ni tu mismo podrías reconocerlo.
El rey asombrado le dijo. Dime tu como es el diablo
El viejo se acercó a el trono del rey y con un movimiento de sus manos hizo aparecer un espejo y luego se lo entrego al gobernante diciendo míralo aquí majestad.
Se dice que el rey al verse en el espejo vio su alma y no su cara e instantáneamente murió y aquel mago desaparecio.
